Esta manta está enteramente tejida a mano con lana de merino orgánica proveniente de Neuquén, hilada manualmente por una cooperativa de mujeres de la Provincia de Buenos Aires. Cada pieza de la manta está realizada por una mujer distinta. Luego se unen las partes para crear esta manta que da la bienvenida al mundo a los bebés.
Esta pieza fue creada con la inspiración en la colaboración en red, en la unión de las partes para tejer un futuro sostenible y respetuoso con las personas y con el medioambiente.
Con el sueño de construir un proyecto sostenible, en 2009 Adriana Marina fundó Animaná, una marca de lujo sustentable que realiza prendas de fibras naturales de la Patagonia y los Andes con el fin de preservar a las comunidades locales, cuidar al medio ambiente y generar riqueza local. ¿Cómo? Formando artesanos y productores, priorizando los procesos de producción sustentables, y a su vez generando una cadena de valor ética, sostenible y transparente.
Animaná significa “un lugar en el cielo” en lengua Kakán, una empresa B certificada de triple impacto -social, ambiental y económico- que trabaja por generar valor agregado en las comunidades locales a través del comercio justo.